Queda claro que si hay un momento crucial en lo que a transiciones vitales ese refiere, ese es la maternidad. Es, sin duda, una experiencia de profunda transformación. A mi parecer es un renacer en alguien que ya no tiene la responsabilidad única de cuidar de sí mismo, sino que ahora es alguien más quién verdaderamente depende de una y eso... también hay que aprender a sostenerlo saludablemente. Resulta todo un desafío y un torbellino físico y emocional.
Destacaría que en un momento de tantas exigencias, no perdiéramos de vista lo esencial, lo único que importa. El buen diálogo con una misma y la conexión con el bebé. Ahí es donde entra en juego esta maternidad consciente de la que hoy me gustaría hablarte en este post. Este es un enfoque que busca traer más presencia, reflexión y cuidado a cada momento de la experiencia maternal, permitiéndonos ser más compasivas con nosotras mismas y con nuestros hijos.
Espero que lo disfrutes.
¿Qué es la Maternidad Consciente?
Cuando hablamos de maternidad consciente, estamos hablando de una forma de abordar la maternidad y la crianza desde una atención plena, amorosa y sin juicio. Ser reflexiva en el momento de dar respuesta a las demandas y no actuar por "es lo que toca", "me han dicho que así ha de ser".
Es importante tener en cuenta... ¿Quién eres tú? ¿Cómo es tu forma? ¿así está bien para ti? ¿Lo está en este momento?
Quizás lo más importante radique en tu propia paz con lo que estás construyendo. Que tu forma de vivir la maternidad y maternar, hable de ti y de nadie más. Esto te va a beneficiar en la relación con tu hijo, ya que él o ella a quien busca en esa interacción es a quien tú eres, no a quién quieras parecerte o seguir. Tú, siendo lo más tú posible en un momento vital en el que la exigencia ya es lo suficientemente importante. Sé fiel.
Es fácil quedar atrapadas en lo que se oye en el exterior: las redes sociales, los consejos no solicitados de amigos y familiares, o las expectativas que nosotras mismas nos ponemos al querer ser "las madres perfectas". Sin embargo, la maternidad consciente nos recuerda que la perfección no es el objetivo. El objetivo es estar presentes, aceptar nuestras imperfecciones, y crear un ambiente en el que tanto madre como hijo puedan florecer emocional y psicológicamente.
No hay un tipo de maternidad, hay tantas maternidades como madres y en tu caso, tienes que vivir la tuya.
Principios de la Maternidad Consciente
Si tengo que enumerar los principios en los que se basa la maternidad consciente, te diría que destaco los siguientes:
1. Atención plena
Atención de calidad y sin distracciones. Dando lo que tengo para dar a cada momento. Sabiendo quién soy y atendiendo a quien es mi bebé.
2. Autocuidado y Autocompasión
Prestar especial atención al abuso que hacemos de nosotras mismas. En muchas ocasiones puedes encontrarte desgasta de más porque el nivel de exigencia que te auto impones supera lo necesario.
Recuerda el principio básico; para cuidar, hay que cuidarse.
No existen las malas madres y sí, vas a equivocarte, pero ello también va a permitir a tu hij@ entrenar la resiliencia. Así que, respira. Esto también es muy importante.
3. Aceptación y flexibilidad
Cuando tienes un hij@ la vida se vuelve muy impredecible. Así que, preparada para cambios de última hora y decisiones que no se toman hasta minutos antes.
El caos es un gran compañero de la crianza y está bien que aprendamos a abrazarlo.
4. Comunicación consciente mamá-hij@
Es importante tanto como hablamos como lo que decimos a nuestros hijos.
Esto para mí como profesional de la psicología es uno de los puntos que más me interesa. Son pequeños, pero hablar de emociones desde que lo son es vital para que aprendan a relacionarse con ellas. Sí, hablemos a los niños de la tristeza, de la alegría, del enfado, de la frustración, de la ira, del miedo, de la felicidad, y de todas las emociones que nos acompañan y acompañarán en el camino de la vida. Es bueno que aprendan a entenderlas en ti, para que luego las puedan entender en sí mismos.
También es fundamental la escucha activa, atender sus inquietudes y saber responder a ellas adecuadamente.
Beneficios de la práctica consciente de la Maternidad
- El primer beneficio es para ti. El bienestar de la no sobre-exigencia es incomparable a ningún otro y eso es algo que tu bebé también va a agradecer. Por tanto, desde una madre menos exigente y más disponible, el vínculo entre los dos se verá mucho más fortalecido.
- Además, también va a notarse una reducción del estrés y la ansiedad porque nos vamos a esforzar por mantenernos en el presente, dejar de juzgar el pasado ni viajar demasiado al futuro incierto. Aquí estamos seguras y a salvo.
- Si mamá es capaz de gestionar sus propias emociones, vamos a permitir que el bebé también lo haga de una forma más saludable y adaptativa.
- La conexión contigo misma va a ser mucho más especial y estará más atendida. Sabiendo darte aquello que necesitas a cada momento.
Espero que estas palabras te inspiren para explorar y practicar la maternidad consciente en tu vida diaria, recordándote que cada día es una nueva oportunidad para estar presente, para aprender y para amar con un amor de los de verdad. Un amor sano que ve por igual a todos los miembros y que los atiende de una forma saludable.
Olaya Martínez Gil